El acoso escolar es una práctica que se desarrolla en las instituciones educativas desde hace tiempo, llegando en algunos casos a maltratos físicos o emocionales directos, representa un fenómeno que requiere un tratamiento específico, debido al impacto que genera en todas las personas involucradas. Podemos prevenir estando atentos a los indicios y manifestaciones de los estudiantes, cuando un docente está comprometido con su tarea, puede distinguir claramente los comportamientos de sus estudiantes, ya que es en las actividades diarias donde se ven los cambios en los comportamientos y donde se puede intervenir para evitar, generando una solución temprana.